Dentro de la etapa de diseño sonoro se hacen todos los arreglos de audio de una producción, pero también se contribuye con la narrativa de la historia desde los sonidos. Por ello, Rita García-Salas, supervisora de sonido de Labo, destaca que el diseño sonoro no solo es técnico, sino también artístico.
Entre otros servicios para la industria del entretenimiento audiovisual a esto se dedica Labo, además de la mezcla de sonido en su sala THX que ha hecho durante años. El empuje de la producción de contenidos promovido por las plataformas los hizo ver una oportunidad en los cambios del mercado para crecer su departamento de postproducción de sonido ofreciendo el diseño sonoro para producciones.
Un servicio que incluye, además de la mezcla, la edición y limpieza de diálogos, grabación y edición de efectos sonoros, foley, sonido ambiente, voz en off y los ADR (Automated Dialogue Replacement) en los que los actores regraban los diálogos alterados por el sonido ambiente de una locación, como una escena a la orilla del mar.
“Contribuimos a la narrativa de la historia a través de un meticuloso trabajo en el sonido que involucra muchos procesos técnicos y creativos” explica García-Salas, una guatemalteca que a los 18 años se fue a México para poder estudiar ingeniería en audio.
Labo ha realizado el diseño sonoro de originales de Netflix como La balada de Hugo Sánchez y ¡Nailed it! México Temporada 2 y 3 y actualmente trabajan en otra serie para una plataforma de streaming. Pero uno de los proyectos que ha implicado un reto mayor para el equipo de García-Salas ha sido la película El baile de los 41, estrenada en 2020 en cines y disponible en Netflix desde abril de este año.
Todo el material grabado en una ciudad de este siglo debieron recrearlo, como el de un México de hace un siglo, sin aviones, ni bocinas, ni autos. Una investigación histórica les permitió diseñar la propuesta. “El silencio que hubo en la pandemia nos ayudó. Por estas características particulares, ha sido muy interesante desarrollar una propuesta sonora para este proyecto, el cual implicó un trabajo de varios meses”.
“Si bien sabemos que existe una diferencia en la manera de producir series para plataformas o largometrajes para cine, sea por cuestiones de presupuestos, organización o tiempos, en materia de diseño sonoro el trabajo, la calidad, la creatividad no están comprometidos, aunque los tiempos para series pueden ser un poco más reducidos” comenta García-Salas.
Con el auge de las plataformas de video streaming, Labo ha logrado adaptarse para ofrecer la postproducción de audio e imagen de cualquier tipo de contenido audiovisual para todas las ventanas de exhibición actualmente disponibles. A modo de ejemplo, la compañía se ha equipado de nuevas tecnologías para seguir a la vanguardia en el mundo del entretenimiento audiovisual.
Con sala Dolby Atmos
Labo tiene una nueva sala Dolby Atmos para home entertainment y Atmos music. Esto les permite mezclar en este formato que ofrece un sonido envolvente, y que empieza a masificarse. La compañía puede hacer la mezcla de una serie para una plataforma de video streaming y también música para plataformas como Apple Music, Amazon Music y Tidal, que permiten escuchar en este formato con audífonos. Labo: diseño sonoro para cine y plataformas