LABO Digital retoma su presencia en los mercados en MIP Cancun con Lorenna Ramírez, gerente de Posproducción en México, y Pablo Ossa, gerente general de LABO Colombia.
“El 2022 ha sido el año de las plataformas, las series, la alta demanda y la competencia en el mercado a nivel regional. Teniendo esto en mente y previendo que el 2023 siga en la misma tendencia, hemos enfocado nuestros esfuerzos en el crecimiento, inversión y actualización de nuestros servicios y talento para poder atender a esta demanda y seguir siendo una opción confiable para las producciones y plataformas a nivel regional en nuestras oficinas de México y Colombia” comentan los ejecutivos.
En México aumentaron la capacidad de almacenamiento pasando de 800 terabytes a 3 petabytes, así como la renovación de equipos, monitores y consolas de última generación. “Esto aunado al know how del equipo técnico y creativo y la constante capacitación del mismo, nos ha permitido atender el nivel de volumen que actualmente se necesita en el mercado” señaló Ramírez. Entre las producciones que están trabajando actualmentes están El caso Cassez-Vallarta: una novela criminal (El Estudio, Netflix), Los hermanos Salvador (Sula Films, Disney+), Cuarentones (Corazón Films, Netflix), 40 no es nada (Dopamine, HBO Max), entre otras.
En el caso de Colombia, siguen invirtiendo en el desarrollo de servicios en un mercado cada vez más competitivo en el que han podido participar en los proyectos más grandes y retadores que se han producido en Colombia como Pálpito, Shadow Force, Siempre fui yo, De brutas, nada, entre otros, con clientes locales de gran relevancia como Dynamo, Sony Pictures Television, Mediapro Colombia, CMO Producciones, Jaguar Bite y Caracol Televisión, y a nivel internacional con Apple TV+, Lionsgate, Disney+, Amazon, ViX+, Netflix.
“Estamos preparados y calificados para recibir grandes y complejas producciones de talla mundial y, probablemente, no hay nada que no podamos rodar en Colombia” dice Ossa. “El desafío ahora es trabajar en conjunto con el gobierno y sus instituciones, para impulsar nuestros servicios de posproducción y generar la confianza necesaria con el fin de que cada vez más películas y series sean terminadas técnica y artísticamente en el país”.
Operar en México y Colombia es una oportunidad para optimizar recursos e inversiones en las dos principales verticales de su negocio: la posproducción y el doblaje. “La presencia regional nos permite tener un panorama más amplio de las necesidades y tendencias en el mercado, abriendo las posibilidades de ejecutar un mismo proyecto en los dos países, diseñando flujos específicos multirregión garantizando la seguridad y confidencialidad de los proyectos teniendo el material en un mismo lugar” explican.